TERREMOTO

Sugerida por...Toyita

Sacudida del terreno, ocasionada por fuerzas que actúan en lo interior del globo.

Del latín terraemōtus: "movimiento de la tierra"

Un terremoto, también denominado seísmo o sismo (del griego "σεισμός": "temblor") es una sacudida de la tierra provocada al chocar las placas tectónicas generando una brusca liberación de energía...

...Recientemente nuestro planeta ha sufrido convulsiones importantes, tanto por su magnitud en la escala Richter como por su dureza en cuanto a daños materiales y sobre todo personales...

Mientras escribimos estas líneas nos impacta la noticia del terremoto ocurrido China el pasado 14 de abril, sin olvidarnos de la catástrofe de Haití el 10 de enero del 2010 y cómo no la de Chile el 27 de febrero... nuestra custodio Toyita vivió este sismo de Chile con toda su intensidad, y nos describe la tragedia a través de su impactante relato. Desde LLdM deseamos de corazón que todos nuestros amigos chilenos consigan reconstruir completamente su país y su vida.

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Amigos:

Hemos pasado unos momentos impactantes, aterradores.

Y estamos vivos, de pie, para reconstruir sobre los escombros de nuestros miedos; reconstruir más compañerismo, más amistad, más ayuda mutua, más compasión.
Es interesante lo que hace un terremoto -palabra que les sugiero hoy-, saca de nosotros lo mejor y lo peor, al cordero y al lobo simultáneamente.

Terremoto.

La profunda noche, tres y media de la mañana -dicen que es la hora de los ladrones-, sueño REM, la tierra empieza a oscilar brusca y profunda, como si de pronto hubiésemos ingresado a una batidora eléctrica. Uno para arriba, dos para el lado, minutos que se transforman en una eternidad. ¿Quién dijo que para Dios un día es como mil años y mil años como un día?, si lo relativo del tiempo se aplicase, ese instante nos pareció demasiado largo y aterrador.
Cuando las capas debajo de nuestros pies se acomodan, la tierra baila. Solo que nadie puede saber cuánto durará ni qué tan profundamente cambiará nuestra vida, si logramos salir ilesos en la noche profunda.

Desde ese día nadie es el mismo.

Mi abuela contaba que tenía tres terremotos en el cuerpo, y los contaba como un soldado cuenta y exhibe sus heridas de guerra. Sobreviviente entre miles de muertos.

Hay países que ni se imaginan lo que Haití y Chile ha vivido en este tiempo. Tal vez en sus vidas nunca sepan lo que es un terremoto -ni se los deseo-, cuando el tiempo queda suspendido en el aire y parece que éste de pronto desaparece en cada oscilación y sabemos que somos ínfimos, iguales y frágiles. Que en ese instante eterno no sirve el dinero, la fama, la belleza, el valor, ni la simpatía, nada, no sirve nada sino un patio donde arrancar, y tal vez ni siquiera eso, nada, simplemente esperar.

O rezar.

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... ... ... Hasta la próxima palabra

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