viernes, 10 de septiembre de 2010

VELMEZ

Sugerida por...GoswinthaVestidura que se ponía debajo de la armadura.

Del árabe hispánico malbás, y este del árabe clásico malbas: "vestidura".

Queridos lectores... hace unos pocos siglos el mundo era un lugar bastante diferente al que conocemos actualmente: para empezar, no existían los blogs, ni internet, y la civilización era -probablemente- bastante más peligrosa que en tiempos modernos: no convenía que salieses de casa sin haberte enfundado 40 Kg de acero en el cuerpo gracias a la armadura de rigor, y aún así, los simpáticos parroquianos del pueblo vecino podían decidir recibirte a espadazo limpio mientras te tomabas una pinta en la taberna de la esquina...

Por ello, no es de extrañar que en la Edad Media -más allá de modas y cuestiones estéticas- se generalizara el uso de la loriga: una vestimenta claramente funcional, formada por escamas metálicas o tejido de pequeñas cadenas -conocido como cota de mallas-, típicamente portadas por los militares...

...El problema de esta armadura, muy exitosa allá por ell siglo X, era su incomodidad, así que los caballeros solían vestir un jubón acolchado de lino o algodón relleno de pelo de caballo o de retales llamado velmez, que cubría el cuerpo, los brazos y parte de las piernas, protegiéndose así de las posibles rozaduras e infecciones debidas al contacto de la piel con las piezas metálicas. Al ser acolchado, servía así mismo para un soportar más eficientemente los golpes del oponente.

No se nos ocurre nada mejor que el Cantar del Mio Cid para contextualizar nuestra voz del día. Como sabéis, esta obra anónima relata hazañas heroicas inspiradas en el caballero Rodrigo de Díaz de Vivar, que pasó a la historia como El Cid Campeador. Es la primera obra extensa de la narrativa española, escrita en lengua romance:

Con estos cunplansse çiento de los buenos que y son,
Velmeces vestidos por sufrir las guarnizones,
Desuso las lorigas tan blancas commo el sol.
Sobre las lorigas armiños e peliçones.
E que non parescan las armas, bien prisos los cordones.
So los mantos las espadas dulçes e taiadores.

¡Hasta el próximo duelo de espadas en esta casa de palabras encadenadas! ;)
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4 comentarios:

Marina-Emer dijo...

me encantó todo este relato de historia ...pobres hombres con esa loriga y esejubon de metal Dios mio que modas ahora que vamos casi desnudos...gracias por tu cariñosa visita y palabras a mi poesia ....
los seis versos de tu post son muy bonitos.
besos
Marina

Carmen Silza dijo...

Y llegará el día que desnudos vayamos....interesantes palabras,...conocía el jubón...

Pollo con almendras dijo...

Interesante!

Lívia dijo...

Tudo muito interessante no seu blog, eu adorei os quadros também. Abraços. venha me conhecer também.

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