Bálsamo aromático que se obtiene por incisión en la corteza de un árbol del mismo género botánico que el que produce el estoraque en Malaca y en varias islas de la Sonda.
Del árabe lubān ǧāwī, incienso de Java.
El benjuí se obtiene del estoraque; un árbol de la familia de las Estiracáceas, que mide de cuatro a seis metros de altura, con hojas blandas y flores blancas. Del tronco de este árbol, se hacen incisiones, y se obtiene un bálsamo muy oloroso que se emplea en medicina y perfumería y da nombre a nuestra voz de hoy.
El benjuí es, de hecho, originario de la península de Malaca; un estrecho apéndice del continente asiático y de las islas de la Sonda (grupo de islas al oeste del archipiélago Malayo) como Borneo, Java, Sumatra, Bali, Timor...
Nuestra custodio Olga nos dice: "Es una palabra que adoro, por todo lo que conlleva en su definición", no le falta razón, y es que benjuí es una palabra exótica donde las haya… con aroma intenso y una historia muy interesante, ¡además de ser un magnifico expectorante y antiséptico!
Allá por el siglo XIV, Ibn Battuta (1304-68) fue un viajero y explorador marroquí, que denominó al benjuí “incienso de Java y Sumatra”. Ya entrados el Renacimiento , el benjuí se comenzaba a considerar un obsequio muy preciado que se hacían entre si sultanes y reyes, llegándose a denominar como “el sahumerio -humo que produce una materia aromática- más codiciado”.
¡Hasta nuestra próxima esencia, amigos lectores!
Del árabe lubān ǧāwī, incienso de Java.
El benjuí se obtiene del estoraque; un árbol de la familia de las Estiracáceas, que mide de cuatro a seis metros de altura, con hojas blandas y flores blancas. Del tronco de este árbol, se hacen incisiones, y se obtiene un bálsamo muy oloroso que se emplea en medicina y perfumería y da nombre a nuestra voz de hoy.
El benjuí es, de hecho, originario de la península de Malaca; un estrecho apéndice del continente asiático y de las islas de la Sonda (grupo de islas al oeste del archipiélago Malayo) como Borneo, Java, Sumatra, Bali, Timor...
Nuestra custodio Olga nos dice: "Es una palabra que adoro, por todo lo que conlleva en su definición", no le falta razón, y es que benjuí es una palabra exótica donde las haya… con aroma intenso y una historia muy interesante, ¡además de ser un magnifico expectorante y antiséptico!
Allá por el siglo XIV, Ibn Battuta (1304-68) fue un viajero y explorador marroquí, que denominó al benjuí “incienso de Java y Sumatra”. Ya entrados el Renacimiento , el benjuí se comenzaba a considerar un obsequio muy preciado que se hacían entre si sultanes y reyes, llegándose a denominar como “el sahumerio -humo que produce una materia aromática- más codiciado”.
¡Hasta nuestra próxima esencia, amigos lectores!
6 comentarios:
Realmente evocadora esta palabra.
No la conocía... pero me encanta. Me recuerda a la Alhambra.
Un beso.
Sole.
No tenía ni idea.
Me encantaría poder oler esta "palabra aromática".
Te dejo mis saludos desde Berlín.
Ma'a s-salama (hasta luego)
Me gusta lo que escribis,pues no tenia ni idea.Es bueno saber,me gustó
Besos.
Encantadora y sugerente palabra, Llavero. Sonora y aromática. Como ajonjolí (que hoy han vulgarizado por sésamo).
gracias por encontrarla.
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