1. Excrecencia leñosa cubierta de corteza, que se forma en el tronco o ramas de un árbol.
2. Bulto superficial y por lo común no doloroso, que se forma en la cabeza y en otras partes del cuerpo. En medicina
Nuestra palabra del día, lobanillo, está estrechamente relacionada con la voz lobado del latín lupātus, de lupus, "lobo", nombre que se le da en veterinaria a un tumor carbuncoso que padecen las caballerías en los
encuentros, y el ganado vacuno, lanar y cabrío, en el mismo sitio y en
la papada...
En cualquier caso, designamos con este nombre una excrecencia o protuberancia que se produce en las plantas alterando su textura original. Además, en medicina también se denomina de esta forma al quiste sebáceo originado frecuentemente a partir de la inflamación de las glándulas situadas debajo de la piel.
Hoy contextualizamos el término que nos ocupa con la ayuda de nuestra custodio Amaltea 2012, quien nos comenta refiriéndose a nuestra palabra del día:
“Alguna vez había tropezado con esta palabra. Hoy la he leído en una novela de Georges Perec, "La vida, instrucciones de uso..."
Reproducimos el párrafo alusivo:
“…Encima del trinchero hay dos cuadros firmados por J. T. Maston, un pintor costumbrista de origen inglés que vivió mucho tiempo en América central y tuvo cierta notoriedad a principios de siglo: el primero, titulado El boticario, representa un hombre de levita verdosa, calvo, nariz calzada de quevedos y frente afeada por un lobanillo enorme, que, en el fondo de una tienda oscura llena de grandes tarros cilíndricos, parece descifrar con extrema dificultad una receta; el segundo, El naturalista, presenta un hombre flaco, seco, de rostro enérgico, con una barba cortada a la americana, es decir muy frondosa debajo del mentón. De pie y cruzado de brazos, contempla cómo se debate una ardillita pequeña aprisionada en una telaraña de mallas estrechas, tendida entre dos tuliperos gigantescos y tejida por un bicho repugnante, del tamaño de un huevo de paloma y provisto de patas enormes…
¡Hasta el próximo término lupino! ;-)
.
¡Hasta el próximo término lupino! ;-)
.
5 comentarios:
Y otra muestra,también,en Misericordia de B. Pérez Galdós en el capítulo 3.
"Faltábanle..., si bien podía creerse que hacía las veces de esta el lobanillo del tamaño de un garbanzo, redondo, cárdeno, situado como a media pulgada más arriba del entrecejo."
[El retrato de la protagonista: la Benina.]
Para saber más... Y.
Gracias Y. muy amable.
Un saludo. Dama.
No, no es la foto alusiva a la primera acepción. Y lo de Pérez Galdós, Cárdeno, bragao? Meano? Muy xd! Eh? andestamos llegando!
Anónimo, las palabras a las que aludes en tu comentario son muy interesantes y no están publicadas en La Llave del Mundo (cárdeno, bragado, meano). Las anotamos en nuestra lista de palabras pendientes de publicación ¿Por qué no?.
Si lo deseas, proporciónanos un nombre y formarás parte de nuestros custodios.
Muchas gracias, un saludo. Dama
Dama, eres un amor!.
Publicar un comentario